Hoy se conmemora el centenario del Día Internacional de la Mujer. El tema de este año es: «igual acceso a la educación, formación, ciencia y tecnología: sendero para un trabajo digno para las mujeres”.
Felicidades a todas.
Hoy se conmemora el centenario del Día Internacional de la Mujer. El tema de este año es: «igual acceso a la educación, formación, ciencia y tecnología: sendero para un trabajo digno para las mujeres”.
Felicidades a todas.
Llegamos a Jekyll Island en la tarde. Esta isla tiene un encanto particular, es el sitio ideal para bañarse en ese mar cristalino y tenderse en sus blancas arenas. Además fue lugar de descanso de multimillonarios estadounidenses, durante muchos años.
Nos hospedamos en un hotel modesto cerca de Horton House. Nuestro dormitorio miraba al mar, la vista era magnífica a la puesta de sol. Se respiraba una tranquilidad inusual.
Nos disponíamos a desempacar para bajar a cenar cuando sentimos golpear la celosía. Nos sorprendió porque no había viento, por lo tanto fuimos a ver qué ocurría. Nada pudimos ver.
Luego de degustar una exquisita cena, salimos a tomar aire al parque que rodeaba el hotel. La luz era muy tenue y caminar se dificultaba. Ernesto tropezó con algo duro, parecía un cuerpo inerte. Era un cadáver. Luego otro y después otro. ¿Estábamos soñando? ¿Era producto del champán que habíamos bebido?
Regresamos al hotel. Cuando tocamos el timbre en conserjería, no hubo respuesta. Tomamos la llave y subimos a nuestra habitación sin querer recordar lo visto.
Nos enteramos, al otro día, que Dr Jekyll había pernoctado en la isla homónima.
Con cariño,
Siempre le interesó aprender a tocar algún instrumento, pero nunca pudo por diversos motivos: estudio, falta de estímulo familiar o trabajo.
Los años fueron pasando y ese interés quedó relegado, casi olvidado. Ahora, septuagenario y con mucho tiempo libre, decidió darse una oportunidad.
En música no sé si se da la máxima: “lo que se aprende de niño cuesta mucho menos”; de lo que estoy segura es que cuando uno tiene ganas de hacer algo, sin tener en cuenta la edad, lo logra.
Me pone feliz ver a este hombre de cabello sal y pimienta salir con su guitarra, consuetudinariamente, con una sonrisa a flor de piel. Es una de esas pequeñas cosas simples de la vida que pueden alegrarnos el día.
Nunca es tarde para empezar a aprender.